En 2004 jugó su último partido con el club blaugrana pasando a ser posteriormente el entrenador de su equipo filial y como el entrenador del primer equipo en 2014 tras su paso por Roma y Vigo, camisetas barcelona haciendo revivir los pasados acontecimientos. El jugador, quien ya deslumbrase con su técnica y goles a pesar de su juventud, conquistó en su primera y única temporada como barcelonista una Copa del Rey y una Recopa de Europa además de proclamarse «pichichi» y Balón de Oro en 1997 acaparando toda la atención mediática del fútbol.